Liada, liada, liada… ¡Exposición en camino y yo pintando!
Soy un caso muy terrible, porque soy la típica que se pone el turbo cuando las cosas se van acercando, cuando ya veo las fechas encima es cuando pongo el turbo de la velocidad, la del pincel veloz… y creo que debo reconocer que me gusta trabajar bajo presión.
No sé porqué, me encanta la adrenalina, no me gusta la pasividad, mi pincelada se transforma en más energía cuando estoy con esa fecha límite y es entonces cuando pienso, ¡venga Angie! ¡a pintar, que es lo que toca!
Soy la gran desaparecida para las amistades y para la gente, estoy en mi pequeño espacio, en mi momento creativo donde me olvido del whatsapp, llamadas telefónicas y muchas cositas más.
Cualquiera diría que vivo para trabajar, no sé si trabajo para vivir o cómo es, lo único que sé es que mi trabajo no es ‘tan trabajo’ pintar no es mi obligación, ser creativa es una elección de vida, si coincide en que ese es mi trabajo pues… Siiiiiii…
Trabajo por dinero como todo el mundo, vendo páginas web por dinero, hago logotipos por dinero, doy clases por dinero, el dinero es la energía que nos mueve, es la energía que sale del maravilloso universo para venir y transformar mi vida, para pagar mis facturas, genero, cobro, pago y vuelve a ser así… como cualquier humilde mortal. Aquí la cuestión es… cuando tu pasión es tu trabajo, o tu trabajo es tu pasión, ¿cómo se canaliza y se entiende esto?
Lo voy a decir con estas palabras, hay que tener los suficientes tamaños para dejar de tener un empleo fijo y recibir un sueldo para aventurarte en eso que quieres y poder crear y que lo que te gusta se convierta también en tu fuente de ingresos.
Así que… con un enorme gusto te invito a acompañarme en mi Exposición Mujeres con Alas, donde las protagonistas son esas mujeres que viven, sienten, luchan, trabajan, aman, las que tienen el corazón roto, las que tienen un corazón enorme, las que viven a través de su realidad divina, de su energía y sobretodo de su Luz…
¿Me acompañas?